jueves, 8 de diciembre de 2011

Se fue Pancho, ¿Quién le dio permiso?

Y si, como es eso de que el Presidente Municipal, con la mano en la cintura, presente al Cabildo Municipal reunido en Sesión Extraordinaria, su renuncia definitiva al cargo que desempeña y que le fue conferido por mandato de una mayoría ciudadana, aludiendo, con otras palabras, que la chamba actual le quedó chica y que se le presenta la oportunidad de buscar una mejor pagada, de mayor empaque, en la que luchará con febril denuedo y se partirá la mandarina por el bienestar de un mayor número de queretanos. En la honrosa tarea del servicio público no hay puesto chico, en la mira de los que se sirven del pueblo, sí.

Y que desfachatez y que pobre es nuestra democracia. Lo único que el ciudadano tiene son unos pocos elementos para ejercer el voto con el fin de elegir a quienes desempeñaran los puestos de elección popular. Sin embargo, el mismo ciudadano, una vez que ha elegido, no tiene manera de remover o sancionar el desempeño de sus gobernantes ni mucho menos de licenciarlos, planchándose así el camino para que estos hagan lo que quieran o al menos lo que les convenga. La palabra en la política hace mucho que perdió su valor.

Y bueno, el caso de la renuncia del Presidente Municipal de Querétaro, es algo tan común en el ámbito del México somnoliento, que tomar este tipo de decisiones a espaldas del pueblo, reviste un tinte de legitimidad a fuerza de estarlas repitiendo. A pesar de que el pueblo elige a su presidente y a sus regidores para un período determinado y que por ello se adquiere la responsabilidad de cumplir con dicho nombramiento al límite de sus fuerzas y capacidades y hasta el último minuto de su mandato, eso pocas veces pasa si al electo se le atraviesa una oportunidad de ascenso. La realidad es que el ungido se transforma en un supra-hombre y se instala por encima del ciudadano al grado de despreciar el mandato popular y faltar a su compromiso solo por convenir así a sus intereses. Como las chachas deja tirado el trabajo, desconoce a su patrón, aunque sin mayor escrúpulo ni remedo de pena, lo volverá a buscar para pedirle con su voto una mayor responsabilidad. Eso, cuando no es nombrado con pase automático, prebenda de que dispone su Partido. ¿Como es posible que el ciudadano vuelva a votar por una persona que faltó a su compromiso? ¿Que no fue fiel a su toma de protesta? Porque es obvio que una persona que ya faltó una vez a su palabra, lo volverá a hacer a la menor oportunidad sin consultar al votante. No se vale. El pueblo no cuenta y esa es la realidad y los puestos públicos se tornan en un botín por el que compiten todos contra todos. En las postrimerías de la Revolución, Morones decía, "Si tengo dos millones de votos, no se los voy a dar al generalito ese". Y eso que peleaban por los mismos ideales. Conveniencia pura hasta la fecha.

Los integrantes de un Partido solo se unen cuando se ven amenazados por otro, pero entre ellos se sonríen de frente y se apuñalan por la espalda. No es albur, es en serio. Esta única evidencia de la política gandaya (así, con y), debería bastar para que el IFE pusiera límites impidiendo a un funcionario publico que renuncie a su puesto para escalar a otro. Es que lo quieren todo. Al menos Ebrard ya dio una muestra de respeto al declarar que él si va a terminar su mandato aunque se quede fuera de los tiempos de registro para otras funciones publicas. Vamos, que esta dispuesto a quedar sin chamba de tipo electoral porque debe concluir su mandato como Dios y el pueblo mandan. ¿Ya oíste Pancho?


TROPEZON

Monica, la dirigente de la asociación de sexo-servidoras, exige en nombre de sus compañeras la renuncia del ombudsman queretano, en razón de que no ha resuelto ninguna de las 40 quejas que han interpuesto por violaciones a sus derechos; la otra Mónica, la tocaya y visitadora general de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, argumenta que solo son 5 y que se están atendiendo. Se vale negociar un descuentillo, tratándose de un servicio, pero la CDEH quiere flotar de muertito. ¿Cachuchazo?

Escríbame: ricalmayab@hotmail.com

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